ADVERTENCIA: Para poder apreciar correctamente la calidad de las imágenes y los textos, se ha de poseer de manera innata una pizca de sensibilidad hacia la naturaleza. De otra forma el visionado de imagenes y la lectura podría resultar dañina para la vista, llegando incluso a producir efectos negativos irreversibles en el nervio óptico (se conocen casos de gente que no estaba preparada).


Sé valiente e inténtalo.


Cuando nos veamos, te miraré a los ojos y sabré así si tu vista ha sido capaz de aguantar tanta belleza.

Adelante, pónte cómodo y pasea por mi blog.

Espero que sepas disfrutarlo.
Si pinchas sobre la foto accederás a un nuevo mundo.
Algunas tienen sorpresa, otras no. Cada día serán más las pertenecientes a este mundo paralelo.
Jag ber om ursäkt för min dåliga svenska.
Jag kommer att förbättras successivt.

El girasol, historia y ciencia


La fotografía de arriba la hice en el municipio de Comillas en Cantabria. Es parte de los azulejos que cubren lo que ha acabado llamándose "El Capricho de Gaudí", que inicialmente fue construido como una casa de verano que Máximo Díaz de Quijano, noble de la zona, encargó construir a finales del siglo XIX a Antoni Gaudí i Cornet. Actualmente creo que funciona como restaurante y reclamo turístico.



El girasol es originario de América y los españoles lo trajeron a Europa al principio del siglo XVI.
Su cultivo data del 1.000 a. C. y algunas tribus veneraban imagenes de girasoles como representación de su dios solar.

Helianthus, como se le conoce científicamente, significa "flor que gira con el sol" en griego, debido a su capacidad heliotrópica.
En la Mitología griega aparece una ninfa de agua llamada Clytie, hija del dios Océano y de la diosa del mar Tetis (titánide). Clytie se enamoró de Apolo y lo observaba diariamente desde que salía de su palacio por la mañana hasta que llegaba al oeste por la tarde. Según la leyenda, tras unos días Clytie se transformó en girasol y aún hoy no olvida el objeto de su amor y sigue al sol en su recorrido diario. Una bonita historia. De todas formas, la palabra "girasol" y sus cognados existían desde mucho antes que se trajera el Helianthus annuus a Europa. Algunos eruditos piensan que el mito de Clytie, al cual se refiere Ovidio en Las metamorfosis, en realidad hace referencia al Heliotropium o Caléndula.



El patrón de distribución de las flores y semillas en el girasol tiene relación con el número áureo. De esta forma la planta provee la forma más eficiente de empaquetamiento de las flores y semillas.
El número áureo es un número algebraico que posee muchas propiedades interesantes y que fue descubierto en la antigüedad, no como “unidad” sino como relación o proporción. Esta proporción se encuentra tanto en algunas figuras geométricas como en la naturaleza en elementos tales como caracolas, nervaduras de las hojas de algunos árboles, el grosor de las ramas, etc.
Asimismo, se atribuye un carácter estético especial a los objetos que siguen la razón áurea, así como una importancia mística. A lo largo de la historia, se le ha atribuido importancia en diversas obras de arquitectura y otras artes, aunque algunos de estos casos han sido objetables para las matemáticas y la arqueología.
El primero en hacer un estudio formal sobre el número áureo fue Euclides (300-265 a. C.), quién lo definió de la siguiente manera:
"Se dice que una línea recta está dividida en el extremo y su proporcional cuando la línea entera es al segmento mayor como el mayor es al menor."
Un poco lioso, pero bueno, ahí queda eso del señor Euclides.

3 comentarios:

  1. Hola Goyo, soy Raquel.... je,je.. me ecantan las fotos que haces, son PRECIOSAS... ;)*

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  2. hola amigo querido me encnatan los girasoles felicidades por tu blog.

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  3. BUENA LA LEYENDA DEL GIRASOL

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