ADVERTENCIA: Para poder apreciar correctamente la calidad de las imágenes y los textos, se ha de poseer de manera innata una pizca de sensibilidad hacia la naturaleza. De otra forma el visionado de imagenes y la lectura podría resultar dañina para la vista, llegando incluso a producir efectos negativos irreversibles en el nervio óptico (se conocen casos de gente que no estaba preparada).


Sé valiente e inténtalo.


Cuando nos veamos, te miraré a los ojos y sabré así si tu vista ha sido capaz de aguantar tanta belleza.

Adelante, pónte cómodo y pasea por mi blog.

Espero que sepas disfrutarlo.
Si pinchas sobre la foto accederás a un nuevo mundo.
Algunas tienen sorpresa, otras no. Cada día serán más las pertenecientes a este mundo paralelo.
Jag ber om ursäkt för min dåliga svenska.
Jag kommer att förbättras successivt.

No sabemos respetar a la naturaleza

Este año 2010 ha sido proclamado como el Año internacional de la Biodiversidad y ya sólo eso debe ser excusa para dedicarnos un poquito más al medio que nos rodea y preocuparnos por el resto de seres vivos que habitan el planeta.

Las siguientes fotografías fueron tomadas hace un año en la FIO (Feria Internacional de Ornitología) que se celebra anualmente en el Parque (ahora Nacional) de Monfragüe, en Extremadura.
Se trata de un evento al que acude mucha gente y se mueven muchos vehículos por la zona en esos días. La gente corre de un lugar de observación a otro como si el mirador de la Báscula fuese a desaparecer de un momento a otro , o la Portilla del Tiétar se fuera a venir abajo ese mismo día. Entre tanto ir y venir de un lado para otro suceden cosas que a veces pasan desapercibidas para algunos.

Yo vi cómo unas personas bajaban de su flamante vehículo una vez que lo aparcaron en las inmediaciones del Salto del Gitano y apresuradamente se fundían con la multitud que ya allí se encontraba observando aves.


Yo vi cómo no fueron conscientes del daño que habían causado hacía seguramente pocos minutos.


Yo vi cómo a aquellas personas les cegó su afán de ver aves y actuando como ovejas bobas (donde van una van todas) segaron la vida de este ser emplumado.


Yo vi cómo esta curruca capirotada yacía incrustada en el vehículo que momentos antes unas personas manejaban con la intención de llegar a un lugar donde irónicamente querían ver aves viviendo en su medio.
No se percataron en ningún momento que ya estaban en ese medio donde vivían las aves mucho antes incluso de aparcar su vehículo y que debían ser respetuosos al máximo porque se encontraban en su casa, la casa de la naturaleza, donde ellos son extraños.

Yo este año acudiré, como lo hice el año pasado, a la FIO y espero no tener a mi vuelta ninguna imagen semejante a estas para mostraros.

17 comentarios:

  1. Muy buena observación, Ars.
    Hay que saber mirar...incluso a uno mismo.
    Siempre somos parte integrante del entorno y no sólo cuando nos disfrazamos de naturalistas.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Las fotos con encanto tienen eso, nos enseñan lo que muchos ojos no ven.
    Saluds

    ResponderEliminar
  3. Jo, qué mal se queda el cuerpo cuando ves tanta...¿prepotencia?, si, es difícil ser conscientes.

    Espero que:
    1. Sigas viendo.

    2. Que veas otras cosas más coherentes con el medio.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Muy bueno. Una reflexión acertadísima, y una imagen que vale más que muchas palabras.

    ResponderEliminar
  5. Desgraciadamente es lo que se potencia en la actualidad, asfalto, carreteras, coches y más coches, comiendo a pasos agigantados espacio a la naturaleza...
    Interesante reflexión!!

    ResponderEliminar
  6. Incluso los naturalistas caemos en esas contradicciones, si queremos acercarnos a la naturaleza muchas veces no hay más remedio que ir en automóvil y estas víctimas incentes son inevitables.
    Otra cosa es el ansia de ir todos al mismo sitio, generalmente emblemático, sin respto por nada ni por nadie.
    Las acumulaciones de gente son todo lo contrario a lo necesario para la observación pausada y paciente.

    ResponderEliminar
  7. Ya sabes, es que ese ave es pequeñita y no tiene importancia hombre. La gente va a ver a los buitres. Sólo he estado una vez en Monfragüe, y no creo que vuelva. Me gustaría pensar que fue porque elegí un mal día, pero la romería de coches era increíble a cierta hora de la mañana, autobuses de jubilados que se bajaban haciendo el buitre (por no decir el mono). Hasta les llamé la atención y les pedí silencio, que si venían a observar aves no era eso precisamente lo que había que hacer. Pero bueno, es una incultura comprensible si nadie les ha educado para ésto. Pero para que hable yo ya me tenían que haber quemado. En fin, que observando de verdad había cuatro personas.

    Me fui con un mal sabor de boca, y mira que me da rabia porque seguramente es un lugar maravilloso.

    (Soy Miazuldemar, pero no entré en el perfil, sorry)

    ResponderEliminar
  8. Y seguramente éste será uno de los males menores que producen estas "romerias" de ecologetas...
    Parece como si el amar la Naturaleza estuviese de moda y esto fuese una medalla a colgarse del cuello, olvidandose que a la Naturaleza se la disfruta desde la humildad, desde abajo, dejandola ser como es.
    Una penita...

    Un abrazo Goyo

    ResponderEliminar
  9. Es una verdadera lastima observar estas fotografias... donde la muerte es la protagonista...

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  10. No conozco este Parque Natural de Monfragüe, pero sí que es verdad que en estos entornos se debería circular con más precaución y respetando al máximo las especies animales que allí habitan. Pero bueno, es lo que comentan todos, hay gente que va allí por ir, y no por verdadero amor a la naturaleza. Y lo malo es que esta "incultura" no cambia por muchos años que pasen. En fin...una pena.

    ResponderEliminar
  11. Lamento decir que conozco el salto del gitano por haber pasado por allí varias veces. Y lamento decirlo porque yo, al igual que los "energúmenos" del coche, no fui consciente de la invasión que estaba llevando a cabo.
    También lo lamento, porque en aquellas ocasiones, mi coche era el único: mucho me temo que con estos eventos estemos fomentando el turismo al por mayor en vez del amor a la naturaleza.
    Pero como soy muy optimista, quiero pensar que, efectivamente, estas actividades nos acercan a la naturaleza a pesar de los múltiples daños "colaterales"; al igual que nos acercó Félix Rodríguez de la Fuente, aunque ahora se pongan en entredicho sus métodos.

    ResponderEliminar
  12. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  13. (perdoa-me por suprimir o primeiro comentário)
    Com raras exceções, o ser humano não é aquele que se esforça para integrar-se à natureza de corpo e alma. O que ele quer é ficar à sombra de uma árvore, olhar os pássaros ao longe sem se dar com a delicada vida deles; gosta de banhar-se ao mar, cultivar um canteiro com flores; gosta de matar mariposas, besouros e gafanhotos quando algum desavisado entra em sua casa para atrapalhar.
    Desprovido de sensibilidade, chega esbarrando, sujando e também matando pequenas criaturas sem se dar conta e sem remorso!
    O homem, por ter dificuldade de compreender a Natureza e por falta de interesse, não a conserva, nem se importa. É negligente por arrogância, supondo ser a sua espécie superior a todas as outras. Pobre ser humano... menor que essa pequena ave vítima da imprudência.
    Com raras exceções.

    Ótimo blog, um trabalho fotográfico espetacular!
    Abraço
    Olga

    ResponderEliminar
  14. SIn lugar a dudas estoy de acuerdo....

    Saludos

    ResponderEliminar
  15. He localizado un blog usando Google y debo decir que este es uno de los mejores artículos bien escritos que he visto en mucho tiempo .

    ResponderEliminar